El come-perros

No se por qué cuando tengo vacaciones me da por ver Caso Cerrado. Será por todo el tiempo libre y porque es un programa que no tiene ni un pelo de aburrido, como quizá parecerá a muchos.

Pero en el capítulo de hoy vi un caso excepcional. Porque ponía en un perfecto jaque mate a nuestra cultura, sus prejuicios y arbitrariedades sobre un tema que casi nunca se trata.

Dos mujeres, una señora y una joven, exigían encarecidamente a la doctora Polo que pusiera tras las rejas a su vecino. ¿El crimen? Comer perros. Sí, el demandado admitía sin ningún remordimiento que can que se encontraba en la calle, a su casa lo llevaba, allí lo mataba y lo cocinaba de la forma que más le agradara.

Luego que la demanda fue presentada, llegó el turno del acusado, quien se defendió de manera tan magistral que me permitió televisar lo que nunca antes había visto: a la doctora Polo completamente anulada; confundida y sin ningún discurso coherente.

– Explícame… Cómo puedes ser capaz de comer perros… – preguntó con una entonación y un rostro que comunicaban un profundo desprecio por la práctica del demandado.

– Pero doctora, yo no veo qué hay de malo en comer perros… Hay gente que come pavos, pollos, marranos, peces… ¿Por qué no voy a poder yo comer perros? En la mesa todos saben igual…

Ante esta grandiosa respuesta, que puso sobre le mesa la inconsistencia de la actitud y el pensamiento de los allí presentes, la doctora vio tocado su más arraigado especismo y respondió una sarta de ideas poco nítidas e incoherentes, del tipo: «Es muy distinto, el perro es el mejor amigo del hombre. Los perros están domesticados, comer perros no es aceptado en nuestra cultura, ¿acaso nunca has tenido una mascota?»

Lamentablemente la jueza no pudo evitar caer en un par de non sequitur, además de una ad populum. Pero el lúcido demandado no esperó: «Doctora, yo le quisiera preguntar una cosa.»

Ella intentó evitar la pregunta diciendo «Tú no has venido aquí a hacerme preguntas», mas él se adelantó diciendo:

– Si usted defiende la vida de los animales, ¿por qué se come a los pollos y las reses?

¡Grandioso!

– No estamos defendiendo la vida de los animales… – respondió titubeando y cambió de tema apresuradamente. ¿Coherente? Yo no lo sé…

En mi opinión nos encontramos ante un claro ejemplo de una persona atrapada en sus celdas mentales culturales, que es incapaz de vislumbrar que en otras partes del mundo comer perros es lo más normal del mundo (China y zonas de México) mientras que la carne de res o de cerdo es considerado aberrante (India e Israel respectivamente).

Porsupuesto que la conclusión aquí no es «sigamos comiendo perros, porque éticamente es equivalente a comer vacas», sino más bien «si no vas a permitir que los demás coman perros, gatos, o lo que se les plazca, hazte vegano(a)».

3 Responses to El come-perros

  1. Pfff, qué estupidez. Pero eso le pasa a la gente por no pensar, pobre vieja ridícula esa tal doctora Polo.

    El hecho de que los pollos sean animales también no significa que «si no como perro tampoco debo comer pollo».

    Yo al tipo le habría preguntado más bien: Tu mamá es mujer? Tu esposa es mujer?… Te coges a tu esposa?… y a tu nana??

    Jajaja, pues igual, no por ser ambos animales es aceptable que se coma a ambos. Y si le daba lo mismo comer perro que pollo, pues yo le habría aconsejado que para evitar líos comiera mejor pollo, que no fuera imbécil.

    En resumen, la verdadera razón por la que no comemos perros es porque no es socialmente aceptado Y PUNTO. Si en otras partes se los comen, pues acá NO.

    Pero como la Dra. Polo es pend3ja, pues se dejó confundir por el maje este.

  2. Yosan dice:

    pattymetalgirl, no tienes ningún argumento válido y usas la falacia ad populum que ya fue comentada en el articulo.

  3. Yo dice:

    Enfermo. Y te lo dice una vegana.

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